Un entorno acogedor y humanizado es capaz de reducir los niveles de ansiedad, estrés y miedo que se generan al ingresar en una UCI, y más si se trata de pacientes pediátricos. Esta es la finalidad del proyecto de humanización de las nuevas salas de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos (UCIP) del Hospital Universitario Son Espases. Un grupo multidisciplinar de facultativos, enfermeros y auxiliares ha trabajado en este proyecto para adaptar la unidad a las necesidades biopsicosociales de los niños y sus familias. Así, durante un año recogieron información acerca de las necesidades que tenían los padres de los menores y elaboraron un plan de actuación jerarquizado.